BOTELLAS SENSORIALES

Las botellas sensoriales son botellas de plástico que rellenamos con objetos que estimulan la curiosidad  de un niño. Pueden ser educativas, temáticas o simplemente para la diversión.

Si las tenemos rellenas con agua y objetos que se mueven en su interior al agitar, conseguimos un efecto calmante al colocarlas sobre una mesa y ver cómo los objetos se recolocan al "caer".

Si las agitamos delante de la mirada del niño, podemos lograr seguimiento con los ojos, También propiciar que extiendan sus bracitos para cogerlas.

Juntos en clase hemos elaborado dos botellas sensoriales, una con ponpones y agua y otra con cascabeles pequeños y agua. Este ha sido el proceso:

 

Una vez acabadas nos gustó mucho el efecto que hacían al moverlas:

Y nos resultó muy curioso lo que pasaba en ellas.
La de cascabeles cada vez que le dábamos la vuelta estos caían al fondo de la botella, sin embargo la de los pompones cada vez que le dábamos la vuelta subían... ¡que cosas más raras pasan en nuestra clase!

Estuvieron un rato dándoles las vueltas a las botellas para ver si esto pasaba siempre...
Y sus caras eran de curiosidad como podéis ver!
Estuvimos planteando hipótesis de porqué podía pasar esto y las respuestas fueron variadas:
- Porque le hemos puesto agua
- Porque los pompones son más bonitos.
- Porque mira... le doy la vuelta y otra vez sube.
- Porque está en una botella.

No hemos resuelto todavía el misterio, vamos a seguir investigando sobre el asunto para ver a que conclusión podemos llegar.

IMPORTANTE PAPÁS: No quiero que les resolváis el conflicto de que algunos objetos flotan y otros no. Esta forma de plantear problemas que surgen en las actividades diarias del centro y de la vida diaria nos ayudan a dejar que los niños piensen y creen sus propias conclusiones.
 Es muy importante dejar que los niños creen  hipótesis aunque estas sean equivocadas. NO DEMOS PASOS POR ELLOS, DEJEMOS QUE SUS PIES HAGAN EL CAMINO.


TAREA PARA CASA:
Pero si que nos podéis ayudar a seguir con nuestra investigación desde casa, les he dicho que cuando se vayan a bañar tienen que llevarse juguetes a la bañera (con el permiso de los papis) y meterlos en el agua a ver que pasa.
Preguntarles que le pasa al muñeco, la esponja, el bote de jabón, etc.. Vuelvo a rogaros que les dejéis plantear hipótesis sin dar la versión adulta, es más importante el proceso de pensar posibles soluciones que la respuesta correcta.